top of page
UNIVERISIDADE DO CHILE_edited.jpg

Chile

El sistema de educación superior se entiende como educación terciaria, estando estructurado por cuatro tipos de instituciones: Universidades, Institutos Profesionales, Centros de Formación Técnica y Establecimientos de Educación Superior de las Fuerzas Armadas.

Chile

Mapa de Chile

Población: 19,49 millones (2021)

Superficie: 756.950 km²

lengua española

Matrícula en educación superior: 131.758

El Sistema Educativo Chileno presenta diferencias importantes con relación a Brasil En esta página, a medida que avance la investigación, iremos actualizando los datos comparativos entre los países estudiados. Por ahora, encontrará información general sobre la Educación Superior en Chile en este espacio.

logo del Ministerio de Educación de Chile
Cristóbal Villalobos

Cristóbal Villalobos (UC, Chile)

Vicedirector CEPPE UC

Ministério de Educación

Educación Superior en Chile

En Chile, y según la Subsecretaría de Educación Superior del Ministerio de Educación (MINEDUC, 2022), se entiende por sistema de educación superior la educación terciaria, conformada por cuatro tipos de instituciones:

a) Universidades;

b) Institutos Profesionales;

c) Centros de Formación Técnica y;

d) Instituciones de Educación Superior de las Fuerzas Armadas.

Estas instituciones son las únicas autorizadas para ofrecer títulos técnicos de nivel superior, títulos profesionales y títulos académicos, conformando, en su conjunto, un sistema que cuenta con aproximadamente 1,2 millones de estudiantes.

En general, se puede decir que el sistema de educación superior se organiza a través de vías muy diferenciadas. Así, si bien las universidades son las instituciones que pueden otorgar títulos profesionales y todo tipo de títulos académicos, especialmente de licenciatura, maestría y doctorado, también son las únicas instituciones que pueden otorgar títulos profesionales para los cuales es necesario haber obtenido previamente el título de licenciatura. (a excepción del título de abogado, otorgado por la Corte Suprema), los Institutos Profesionales sólo pueden otorgar títulos profesionales en carreras que no requieran título de bachiller, así como diplomas técnicos de nivel superior. Finalmente, los Centros de Formación Técnica sólo pueden otorgar títulos técnicos de nivel superior y no tienen derecho a otorgar títulos académicos. De esta manera, el sistema se estructura a través de estos tres canales que, si bien tienen ciertos canales de comunicación y vinculación, generalmente se conciben como canales paralelos (Salazar y Rifo, 2021). En 2022 se encontraban en funcionamiento 50 Centros de Formación Técnica, con 131.758 estudiantes. De ellos, 13 están acreditados, lo que representa el 86,0% del total de inscripciones del CFT. De ellos, 15 CFT son de propiedad estatal con actividades académicas con una matrícula de más de 8.700 personas. En cuanto a los institutos profesionales, existen 32 instituciones con una matrícula de 397.705 estudiantes. Finalmente, existen 58 universidades (40 privadas) con una matrícula de 772.462 personas, lo que representa más del 40% de la matrícula total en educación superior.

En términos de procesos institucionales y organizacionales, el sistema de educación superior en Chile ha experimentado tres transformaciones principales durante las últimas cinco décadas. En primer lugar, es un sistema que ha experimentado un crecimiento constante, pasando de un sistema elitista que atendía a menos del 5% de los estudiantes a un sistema altamente masificado, que incorpora a más del 60% de los estudiantes que completan la educación secundaria. (Kuzmanic, et al., 2023), ubicando a Chile como uno de los países de la OCDE con mayor tasa de matrícula en educación superior (Guzmán-Valenzuela y Rojas-Murphy, 2024). En segundo lugar, el sistema de educación terciaria del país está experimentando un proceso de privatización y comercialización de la educación superior. Este proceso se inició con la reforma estructural impulsada por la dictadura militar a principios de los años ochenta del siglo pasado. Esto dio lugar a un mercado competitivo para las instituciones educativas y favoreció un aumento de la inversión privada en educación superior, en detrimento de una disminución del gasto público (Quaresma, et al., 2022), configurando un sistema que actualmente cuenta con una matrícula privada que supera el 80% de la matrícula total en educación superior. Finalmente, el sistema de educación superior chileno, si bien ha reducido las brechas de acceso por nivel socioeconómico, ha registrado una fuerte heterogeneización de su oferta, lo que ha dado lugar a un sistema dual de educación superior, en el que las experiencias de los estudiantes varían significativamente en función de su origen social y las instituciones a las que acceden (Quaresma y Villalobos, 2022).

De esta manera, el sistema educativo chileno presenta una estratificación vertical, reflejada en el prestigio diferenciado de distintos tipos de instituciones. Finalmente, el crecimiento exponencial de la educación superior privada ha llevado a un aumento de sus beneficios económicos, principalmente a través de tasas y pagos impuestos a los estudiantes. En este modelo orientado al mercado, los estudiantes se vuelven responsables de financiar su propia educación (Quaresma, 2023). Así, como resultado de políticas educativas que favorecen la desregulación de los mercados, el sistema de educación superior en Chile ha provocado que las familias tengan mayores gastos para la educación de sus hijos (Bellei y Villalobos, 2023).

Cristóbal Villalobos, de la Universidad de Chile, presentó la conferencia "Educación Superior en Chile: Un sistema maduro orientado al mercado" en el Seminario "Políticas de Educación Superior en América Latina: Expansión, Diferenciación y Equidad"

Cristóbal Villalobos (UC, Chile)

bottom of page